ceniza constante más allá del amor

Cerrar podrá mis ojos la postrera NO Sombra No que me llevare

el blanco día, No, ni mis ojos ni mis manos ni mis

hoyos podrá cerrar no.

La sombra de ahora No.

Y podrá desatar esta alma mía

¿desatar de qué?

¿al nudo de la mordaza de qué?

¿al nudo con qué miedos?

Hora, a su afán ansioso lisonjera;

A estas horas, aquí habría que ir a bailar danzón habría que ir a escuchar los gritos que gritan en el poema de abajo y dejar mi poema encerrado.

Mas no de esotra parte en la ribera mas no desotra parte

en la que Dejará la memoria, en donde ardía:

mas no desotra parte en la que ardían los cuerpos y se quedaba memoria, en la que querían quemar memoria y quemaban cuerpos en la que nada nada nada nadar sabe mi llama el agua fría, qué agua tan agua pero tanta y tamaña tierra para nada, para tanto perder el respeto

///// a ley severa.

Alma,

¿a quiénes todos? ¿un Dios? ¿prisión? ¿ha sido?, Venas, que humor

a tanto fuego

pero la funeraria era una estafa, pero la funeraria dejo los cuerpos muertos y les entregó cenizas de qué árbol

les han dado la tierra la ceniza les han dado pero qué pero qué tierra pero qué

médulas [pero qué adns] [pero qué análisis con qué forenses nos han dado

nos han dado la tierra] que han gloriosamente ardido en qué ceniza nos han ardido en qué ceniza abuela también

una ceniza es una ceniza es una ceniza

 

¿pero y los cuerpos?

 

Ellos Su cuerpo Dejará Sus cuerpos

no su cuidado no su descuido no serán ceniza,

NO tendrá sentido;
Polvo serán, mas polvo amordazado.

*(publicado originalmente en la antología COMUNA LITERARIA, 1.  Proyecto Submarino, Querétaro, 2017)